Los tubos radiantes a gas funcionan de manera descentralizada. Generan calor donde se requiere. Un tubo radiante emite radiación infrarroja a través del largo tubo radiante. Los tubos radiantes Schwank se caracterizan por soluciones innovadoras y detalladas y los más altos estándares de calidad «Made in Germany». En consecuencia, los materiales utilizados en su fabricación están seleccionados para conseguir una alta eficiencia y durabilidad.
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Tubos radiantes: sus beneficios de un vistazo
Aunque un tubo radiante, como solución de calefacción infrarroja descentralizada, utiliza los mismos principios físicos que un calentador luminoso, su principio de funcionamiento es diferente. En el caso de los tubos radiantes, la combustión de la mezcla de gas y aire tiene lugar dentro de un tubo de acero largo. Este tubo se calienta hasta aproximadamente 580 ° C y posteriormente emite la radiación infrarroja. El principio del calentamiento por infrarrojos se ha adoptado de la naturaleza, porque los rayos infrarrojos del sol viajan a través del aire sin calentarlo y emiten su energía, en otras palabras, calor, solo cuando inciden sobre las superficies. Los tubos radiantes de Schwank utilizan la misma tecnología natural para calentar edificios de manera eficiente en términos de energía. Los rayos infrarrojos se convierten en calor en los puntos donde inciden. Por lo tanto, el calentamiento se realiza donde se requiere Las superficies absorben la energía térmica y, a su vez, lo transmiten al medio ambiente. Esto da como resultado un microclima equilibrado compuesto de aire y radiación de calor reduciendo significativamente los costes de energía y mejorando la
Sensación de confort de las personas. En comparación con los sistemas convencionales, el ahorro generalmente alcanza entre el 30% y el 50%.